This PM spills the tea! Lo que tenés que saber y nadie te dice para tener éxito como freelancer

Agostina Lauría

Agostina Lauría – Project Manager – Patagonia Translations

Para empezar

La forma de entrar en contacto con agencias locales, internacionales o clientes directos puede make or break tus posibilidades de conseguir ingresar al equipo de freelancers que deseas.

Al escribir el correo inicial de presentación, la redacción debe ser impecable. Si alguien que selecciona personal, que en teoría es linguist expert, ve un error de ortografía o gramática, directamente descartará tu CV sin importar cuánta formación o experiencia tengas.

Cuando contactes a un nuevo cliente, es importante que primero lo investigues un poco. Esto te permitirá dos cosas:

  • ajustar tu CV a las necesidades específicas de ese cliente en cuanto a los servicios que ofrecés y
  • tener una idea aproximada de qué tarifas maneja ese cliente. Las agencias locales, por lo general establecen sus tarifas en la moneda local y descartarán a quienes propongan tarifas en moneda extranjera. Un cliente directo extranjero probablemente aceptará una tarifa en dólares o euros, pero en ese caso es atinado averiguar quiénes son tus competidores en ese mercado y establecer tu tarifa en función de eso.

La preparación del CV merece un capítulo aparte, pero recibirás más respuestas mientras más concreto sea. En el sector de la traducción los clientes quieren saber qué pares lingüísticos manejás, en qué temas te especializás, qué tareas hacés, con qué herramientas trabajás y a qué precio. Si dedicás la parte inicial del CV a dejar esto bien en claro, vas a llamar la atención de tu cliente e invitarlo a que vea toda tu formación y experiencia.

Primeros proyectos

Tu CV y carta de presentación llamaron la atención de tu nuevo cliente y te seleccionó para empezar el período de prueba. ¿Y ahora qué?

Los procesos de selección difieren de cliente a cliente, pero por lo general requerirán proyectos de prueba. Algunos, exigen pruebas no remuneradas para completar el proceso. Otros, directamente comienzan a enviarte trabajo, pero es muy probable que te evalúen más detenidamente los primeros meses y te envíen feedback. El feedback tendrá el objetivo de ir alineando tu trabajo con las expectativas del cliente, por lo que no debés ponerte a la defensiva, sino confirmar recepción y hacer preguntas en caso de que tengas dudas. ¡La idea de tu cliente es ayudarte!

Pasado el período inicial, comenzarás a recibir trabajo con regularidad y, seguramente, feedback de forma más esporádica. ¡Felicitaciones! Sos un approved vendor.

A esta altura, ya entenderás el ciclo de un proyecto de principio a fin y cuáles son tus responsabilidades en cada paso. Pero si no lo tenés claro, no dudes en preguntar a los project managers (PMs) con los que seguramente ya tendrás una relación fluida. Los PMs no están sólo para ubicar proyectos, sino para ayudarte a que trabajes lo más posible y de la mejor forma.

En el día a día del trabajo de una agencia de traducciones, los correos llegan por cientos y los PMs estamos atiborrados de cosas pendientes. Tu comunicación tiene que ser clara y precisa respecto de tu disponibilidad e intereses. Además, si sos freelancer, sos tu propio jefe y, por ende, establecés tus propias tarifas. Si bien algunas agencias tienen tarifas prefijadas, hay agencias que aceptan negociarlas.

En estos casos, es importante que cuando necesites hacer una actualización, te comuniques con tu cliente y lo pidas. Si están dentro de parámetros aceptables (podés averiguar con colegas o incluso preguntarle a los PMs para que te den una idea aproximada) y te has convertido en un recurso confiable para tu cliente, seguramente no tendrá problema en aceptar la actualización.

Comunicación

Entre lo que pienso,
lo que quiero decir,
lo que creo decir,
lo que digo,
lo que querés oír,
lo que oís,
lo que creés entender,
lo que querés entender,
lo que entendés,
existen nueve posibilidades
de no entenderse.

El trato cordial debe mantenerse durante todo el tiempo que dure la relación laboral, incluso si aparecen conflictos. Recordá siempre que ambas partes, vos y tu cliente, tienen buenas intenciones y presiones diferentes que intentan balancear para poder completar proyectos. Si aparece un conflicto, será a partir de un malentendido y no de una intención directa de arruinarte el día. Con esto en mente, contactate con tu cliente y por escrito intentá llegar a un acuerdo beneficioso para ambos.

En vez de asumir que hay una mala intención, hacé todas las preguntas que sean necesarias para entender el origen del malentendido y, más importante aún, qué acciones lo solucionarían. Tu cliente valorará tu interés por resolver el conflicto y seguramente mostrará más predisposición para ayudarte.

Ready, set, go!
Ahora te invito a que empieces a trabajar para armar tu propia cartera de clientes. Investigá el mercado local, reunite con colegas que ya están trabajando y preguntales sobre sus clientes y sobre cómo manejan sus tarifas. Revisá tu CV para ver si está adaptado a los clientes que buscás y si tiene una introducción completa.

Con el tiempo, vas a empezar a recibir cada vez más trabajo y eso te va a dar la libertad de elegir los proyectos que te parezcan más interesantes y que tengan que ver con áreas de tu interés. ¡Paciencia, dedicación y adelante!

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